Es muy probable que no hayas escuchado nunca el nombre de Sabiñánigo. Si es así y eres un amante del turismo rural, ¡tienes que ponerle solución a ello de inmediato!
El municipio de Sabiñánigo es uno de los más grandes de España en cuanto a núcleos urbanos. En torno a su Ayuntamiento existen un total de 82 pueblos de los que actualmente 54 están habitados. En total, se trata de un censo de 10.000 habitantes en un lugar ideal entre los valles de Aragón y de Tena.
¿Y qué tiene de especial este enclave, situado a tan solo 55 kilómetros de Huesca, qué ver en Sabiñánigo? Se trata de un típico pueblo de montaña con encanto, lo que le convierte en destino ideal tanto para una escapada en pareja como para un viaje familiar lleno de actividades.
Cómo llegar a Sabiñánigo es fácil: desde luego, y como ocurre en casi todos los casos de zonas rurales, lo mejor es ir equipado con un vehículo propio, pero también hay autobuses desde Zaragoza.
El pirenarium: una visita obligada
Uno de los mayores atractivos de Sabiñánigo es el Pirenarium, el parque de los Pirineos.
El centro de esta visita es su maqueta. Se trata de una construcción que reproduce las diferentes zonas naturales y principales construcciones del Pirineo Aragonés. Tiene más de 100 metros de longitud y supone una sorpresa sobre todo para los más pequeños, que pueden imaginarse dentro de la maqueta, visitando los lugares más inaccesibles de la zona montañosa.
Un taller de maquetas; el Pirenascope, un recorrido en 3D por los valles de la zona; y exposiciones fotográficas del entorno completan un espacio sin duda ideal para las familias que visiten Sabiñánigo.
El horario del parque es desde las 11 de la mañana hasta las 7 de la tarde y el precio de la entrada es de 12 euros para adultos y 9 euros para los niños de 4 a 11 años.
El deporte en el centro
Evidentemente, al tratarse de una zona rural, las actividades deportivas son las más destacadas para hacer en la zona. Desde senderismo, hípica y pesca hasta esquí y paintball son algunas de las actividades más demandadas por los turistas que llegan a la zona.
En ese sentido, nuestra recomendación es que te acerques a la oficina de turismo de Sabiñánigo nada más llegar para que te muestren todas las opciones disponibles, puesto que podrán sugerirte posibilidades que incluso no te hayas planteado hasta el momento.
Camping en plena naturaleza
Otra de las opciones que te sugerimos es utilizar el camping de la zona. El Camping Sabiñánigo dispone de hotel, restaurante, piscina al aire libre y salón compartido. Además, ofrece acceso directo a pistas de esquí e incluso a zonas de barbacoa, con lo que se convierte en un espacio ideal para pasar unos días en familia.
Se trata de un camping muy adaptado y orientado tanto a personas acostumbradas a viajar de este modo como a las que nunca lo han hecho y quieren animarse por primera vez, por lo que, si estás pensando en probar este tipo de turismo, ¡nada mejor que este enclave para lanzarse por primera vez!