7 lugares que los amantes del rafting no pueden dejar de visitar estas vacaciones

 

Hay pocas experiencias en la vida que te aporten la fuerza frenética de una jornada de rafting. Estar en medio de un río bravo, remando con el equipo, evitando las salpicaduras del agua helada, ese ‘todos a una’, los botes continuos dentro de la embarcación.

Si no has probado nunca el rafting, es algo que debes hacer de inmediato. Y si ya lo has hecho más de una vez, seguro que ya estás inquieto en la silla, deseando ponerte el casco, el chaleco salvavidas y coger el remo.

Y es que, de entre todos los deportes de aventura que cada vez son más demandados, el rafting es uno de los más divertidos. En primer lugar porque se practica en grupo, lo que lo hace ideal para una jornada entre amigos o familia, para despedidas de soltero o cumpleaños. Y en segundo lugar porque es refrescante y frenético. ¡La adrenalina te pone a mil por hora!

Además, el rafting es muy positivo para la salud. Ayuda a desconectar y reduce el estrés; te aleja de la ciudad y te lleva a zonas naturales y verdes, algo que tus pulmones agradecerán, y mejorarán tu capacidad pulmonar y motora. Si a todo esto le sumamos que no es una actividad especialmente cara, ¿qué más se le puede pedir?

Rafting en Cataluña

Una de las zonas donde más se ha popularizado este tipo de descensos en grande barcas inflables es en Cataluña. Dicen que esta es la comunidad de España pionera en este tipo de experiencia, tal vez por la existencia de numerosos lugares naturales muy propicios para ello.

Por ejemplo, el Noguera Pallaresa es uno de los ríos donde más actividad de este tipo hay cada año. A él llegan deportistas incluso de otros puntos de europa, que llenan en primavera las orillas de este largo río con sus barcas dispuestos a la aventura.

Tampoco se puede perder de vista el Río Segre o el Noguera Ribagorzana, ya casi en la frontera con Aragón, un espacio ideal para los más valientes o experimentados por la cantidad de aguas bravas que presenta su recorrido.

Rafting en Madrid

Las sierras que rodean Madrid también son especialmente demandadas para el rafting. El Río Cabriel es una de las mejores opciones al respecto. Con rutas superiores a los 5 kilómetros y unas tarifas muy económicas, el descenso por este río es más relajado y amable, lo que lo hace especial para ir con los más pequeños de la casa.

Rafting en Murcia

¿Quién diría que en Murcia se podría hacer rafting? Pues sí, además de playas, que también puedes disfrutar ya que vas a la zona, existe mucha oferta de descensos de río. Los municipios de Calasparra, Cieza y Blanca son los reyes en esta zona, que cada vez está más preparada para este tipo de turismo.

Las empresas que ofrecen este tipo de deporte aventura incluso cuentan con paquetes que incluyen comida, transporte y otras facilidades para hacer de este un día especial y muy divertido. Eso sí, una advertencia: ¡llegarás agotado a la cama!