Pues sí, afortunadamente hoy en día prácticamente cualquier persona puede plantearse un viaje, una escapada o una pequeña excursión para desconectar del ritmo del día a día. Así, la multiplicidad de caracteres de viajeros se ha multiplicado.
Si antes el turista era una persona adinerada, con deseos únicamente de ver galerías y comer en buenos restaurantes, además de dejar sus maletas en hoteles de lujo, hoy podemos ver mochileros, amantes del turismo natural, otros que realizan rutas exclusivamente culinarias, personas que optan por el coche, otros que suben solamente en avión, o los que hacen sus rutas en tren, entre otros.
Entre todas las ‘nuevas ofertas’ turísticas que han surgido en el presente, el turismo deportivo es una de las que más va creciendo. El turismo deportivo se define como un viaje en el que el objetivo principal es la práctica de actividades o ejercicios en zonas naturales muy adecuadas para ello.
Las personas buscan practicar su deporte favorito en las mejores condiciones o bien iniciarse en algunas prácticas que no han realizado todavía pero que les han llamado desde siempre la atención: barranquismo, golf, windsurf… Las opciones son tan variadas como personas hay en el mundo.
Barranquismo, descenso de ríos
Huesca, Cantabria y algunas zonas de Cuenca o Sierra Nevada, en Granada, son las mejores opciones para llevar a cabo experiencias de barranquismo, un deporte que consiste en descender barrancos siguiendo el curso del río. En él se combinan la natación, la escalada y el rapel.
Respecto al descenso de ríos, son muchas las zonas del país que permiten hacer desde experiencias muy tranquilas hasta otras llenas de aventura y riesgo. El sur de España, también por sus bondades climáticas, es la zona que mejor se presta a esto.
Windsurf
El Windsurf se está haciendo cada vez más popular. Se trata de una actividad marina en la que intervienen una tabla de surf que lleva una vela. Saltos, acrobacias y largos paseos se pueden dar a bordo de estos ‘barcos’ que necesitan de la presteza y la agilidad y fuerza del deportista.
El viento y el estado del mar juegan un importante papel en este caso, por lo que elegiremos zonas como Tarifa, en Cádiz, algunas de las plazas de Fuerteventura o el norte del país, en concreto la zona de Cantabria y Galicia.
Golf
De carácter más relajado y quizá para otro tipo de turistas es el golf. Ese deporte individual en el que hay que introducir la pelota en 18 hoyos distintos ha sido siempre terreno de la alta sociedad, pero cada vez se acerca más a todo tipo de deportistas, que poseen o pueden alquilar un equipo y pasar un día intentando mejorar su marca.
Es bien sabido que los mejores campos son el Real club Valderrama, de Cádiz o el Club de Campo de la Villa de Madrid, aunque España está plagada de campos de golf y podrás encontrar dónde iniciarte, si no lo has hecho ya, muy cerquita incluso de tu residencia habitual.
Si eres un aventurero y buscas desconectar de tu día a día, puedes elegir entre todas estas opciones de turismo deportivo.