Pont de Suert, una parada que merece la pena

 

La provincia catalana de Lleida esconde un tesoro natural que se convierte en parada obligatoria para todos los amantes del aire libre que pasen por la zona: el Pont de Suert.

El Pont de Suert es la capital de Alta Ribagoça, y se trata de un espacio natural muy especial, debido a la variedad y las grandes muestras de patrimonio cultural, etnológico y natural.

Los amantes de las rutas senderistas tienen aquí su paraíso, pues desde el propio municipio se pueden llevar a cabo rutas, tanto por el interior de su “geografía urbana” como por el entorno de la Noguera Ribagorzana, donde también existen alternativas para aquellos amantes del deporte aventura, como el rafting o el kayak.

Hay muchas cosas que ver en el Pont de Suert, un municipio que posee un maravilloso casco antiguo del que destaca su famosa Iglesia de Nuestra Asunción.

Un tesoro de la arquitectura

Probablemente nunca has visto un templo católico con estas características. Y esto es lo que tiene de especial la Iglesia de Nuestra Asunción o Iglesia Nueva de Pont de Suert.

Se construyó a mediados del siglo XX y es obra del ingeniero Eduardo Torroja Miret. ¿Pero qué tiene de especial? Se trata de un edificio de única e impresionante nave conformada por arcos apuntados.

Tanto su exterior como su interior son algo muy distinto a cualquier iglesia que hayas visto antes. Además, al conjunto hay que añadir la maravillosa torre de campanario, que está exenta y alcanza los 16 metros de altura.

Centro de Fauna de Pont de Suert

Otro de los atractivos de la zona es el Centro de Fauna de Pont de Suert, un espacio que se implantó en el año 1995, y que fue promovido por el Plan de Conservación de la Nutria en Cataluña.

En ese lugar, inicialmente, se comenzó un trabajo de conservación y sensibilización en torno a la nutria y su hábitat natural, aunque hoy en día se trata con más animales mamíferos semiacuáticos. Es una de las cosas más interesantes que ver en el Pont de Suert.

Dónde comer y dormir en Pont de Suert

Pont de Suert ofrece distintas posibilidades para aquellos que quieren comer o dormir tras disfrutar de su belleza.

Hoteles, pensiones, apartamentos, campings y albergues o refugios se reparten por toda la zona, componiendo una variada oferta para que cualquier tipo de turista encuentre el tipo de establecimiento que más se adapte a su estilo de viaje.

Por otro lado, comer en el Pont de Suert es fácil: su cocina se basa en los recursos de la montaña, que se elaboran aún hoy siguiendo las recetas y los procesos de antaño. Hay restaurantes como Las Cumbres o la Fonda Mas donde podrás degustar los platos más típicos de esta cabecera de Alta Ribagoça.

Los accesos al Pont de Suert son, en coche, por el KM 124 de la N-230, que une Lleida con Vielha, o bien a partir de la N-260 por un enclave llamado Pobla de Segur.

 

Lleida es una provincia llena de tesoros. Si estás pensando hacer un viaje por esta zona de Cataluña y aún no tienes claras tus paradas, Pont de Suert debería ser un alto en el camino obligatorio. Déjate envolver por el encanto de este bonito lugar y vuelve a conectar con la naturaleza.